08 junio, 2017

Nadie puede resistirse al presupuesto chino...


Ni siquiera Jason Bourne pudo hacerlo. ¿Alguien podría culparlo? ¿Alguien podría resistirse a la abultada billetera de los productores chinos? Si fuera actor yo no lo haría, al menos no de manera tajante, mi negación momentánea sería más bien un mero recurso de negociación.

*A partir de aquí puede que haya algún que otro spoiler leve sobre la película*

La gran muralla, no fue el fiasco que todos esperábamos, aunque tampoco logró convertirse en la gran sorpresa del año contradiciendo todas las expectativas que nos habían generado sus trailers. Una película que atrae desde lo visual pero que cuando uno termina de verla (o incluso antes) ya se siente vacío, aburrido o simplemente esperando que finalice para ir a ver un capítulo más de Malcolm, como fue en mi caso.

La fotografía impecable,
la banda de sonido, por momentos también.
Generales sacados de un mmorpg del montón;
me pregunto qué level serán.
-"¿Esto significa que el ataque es antes de lo esperado?"
-"Así es."
-"¿Cuanto tiempo tenemos?"
-"En dos minutos suena la alarma."

Como bien mencionaba anteriormente, esta nueva producción china tiene sus puntos fuertes, entre las que se destaca principalmente su ostentosa puesta en escena, además de sus efectos especiales (algo previsible a decir verdad). Lo que ayuda a que The Great Wall sea disfrutable hasta el momento del primer ataque a la muralla, que sucede casi a los primeros treinta minutos aproximadamente, si no recuerdo mal.

En realidad los efectos y el apartado visual hacen que la película sea llevadera, pero no más que eso, destinándola con exclusividad a un público pochoclero. Uno pasa a esperar la acción sin llegar a preocuparse siquiera por lo que pueda acontecer con la trama misma o con los miembros del reparto.

Me quejaré de su inflada y forzada importancia argumental,
pero no de su bella presencia en pantalla.
"¿Será más redituable protagonizar otra secuela de Bourne,
o hacer una de La Gran Muralla?"

William y Lin innecesariamente acaparan casi toda la atención del film, dejando que el resto del elenco se convierta en un aglomerado insípido y siempre disponible para lo que el guión dictamine. Tranquilamente el resto de los generales pudo haber tenido un mayor protagonismo sin llegar a eclipsar a la pareja principal, otorgando un atractivo aún mayor al film.

Una historia de fantasía épica, como intenta perfilarse La Gran Muralla, que hace aguas al matar voluntariamente a la fantasía misma, desde el momento en que a primera instancia no solo nos muestra los monstruos que acechan al pueblo chino, sino también al jefe final y a su escolta. El misterio por ese enemigo que amenaza con aniquilar la humanidad se revela demasiado rápido, aunque no fue lo único.

El CGI prometía hacer desastres en la película,
pero fue mucho mejor de lo esperado.
No es por criticar la ingeniería romana, pero mis catapultas
en el Rome Total War no tenían esa precisión.
Cualquiera podría pensar que se trata de una alianza
de facciones en un juego de estrategia.

El despliegue de los hombres en la muralla es fabuloso, en especial por el juego cromático que se realiza con las armaduras; un detalle que como hacen notar no es por mero capricho, sino que el color cumple una clara función dentro del ejército. Sin embargo en vez de usarlo para resaltar a los orientales, sutilmente (pero no demasiado), es empleado para destacar los conocimientos militares de los europeos.

Siendo honestos, The Great Wall no carece de recursos como para haber sido una buena película y no solo un entretenimiento efímero, no obstante fracasa al haberse quedado de manera cómoda usando una fórmula narrativa simple y que funciona a prueba de fallos solamente en un nivel básico. Con haberse arriesgado un poco más en su ejecución tal vez hubiese logrado un mejor resultado, o el mismo quizás, aunque por lo menos habría hecho el intento.

¿Es necesario que siempre sean tan infelices
e inútiles los emperadores?
Los asiáticos estaban a años luz del mundo occidental
con esa iluminación al mejor estilo tlgb para interiores.
Oh si, recuérdenos lo genial de la fotografía y las pinceladas
artísticas justo antes de los créditos.



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