07 junio, 2016

Esa eterna falta de respeto...


Si hay un personaje que ha sido bastardeado desde hace mucho tiempo en Fairy Tail ha sido Gajeel. Indudablemente su momento de gloria fue cuando contó con el rol de villano por aquel temprano arco de Phantom Lord (considerado una de las mejores sagas por los fans).

*A partir de aquí habrá algún que otro spoiler leve sobre la serie*

Luego de aquello, con el ingreso al gremio de las hadas el dragon slayer tuvo oportunidades para sobresalir casi con dignidad, pero por una u otra causa siempre fue relegado a un segundo plano quitándole méritos a su participación. No es nada nuevo para quienes seguimos el manga, a estas alturas todos sabemos el favoritismo que Natsu y Lucy tienen en la trama esbozada por Hiro Mashima.

Vale el intento de hacer una última advertencia, y es que si no van al día con el manga (capítulo 488) se van a spoilear bien de lo lindo.

En fin, se sabía que existía una gran posibilidad que los dragon slayers tuvieran las horas contadas en este arco, desde el momento en que Acnología fue por God Serena y lo liquidó en ¿cuatro, cinco viñetas? O al menos que serían puestos fuera de combate a lo largo de la guerra entre los fairy y el ejército de Zeref.

Por lejos, uno de los personajes que más ha evolucionado
a lo largo de la serie, y eso que siempre estuvo
en un papel secundario.

Pero que uno de los miembros de Fairy Tail muriera, y encima a manos de un spriggan creo que era bastante difícil de predecir. En eso, Mashima se gana un gran punto más que merecido. Ahora bien... la despedida quedó como algo sin importancia dentro del gran entramado de la serie, y fue relegada a propósito en un plano de menor importancia.

Casi a mitad del capítulo concluye el momento final entre Gajeel y Levy, alcanzando un climax emocional tremendo pero que sin importarle nada, el propio autor en la página siguiente nos lleva al escenario donde se encuentran Acnología y Eileen, y como antesala para la próxima serialización nos muestra a un August dispuesto a pelear ya.

Seamos sinceros, la "muerte" del discípulo de Metalicana merecía mucho más. Todo el impacto que pudo haber causado, fue absorbido y consumido dentro del propio capítulo, ya que argumentalmente se mostraron situaciones a las que aparentemente se las considera más importantes.

La aparición en el momento justo de Lily
(que está para figurar nomás), fue genial.
Su presencia le dio más emoción a la partida de Gajeel.

El llanto de Levi tranquilamente pudo haber sido utilizado como cierre del capítulo, dejándonos toda una semana de luto. En cambio ahora, directamente esperamos el duelo entre August y las hadas, y de ver nuevamente al rey dragón en acción frente a Eileen.

Si Gajeel quedará en el recuerdo como el Sieghart de Fairy Tail, es toda una incógnita (Jeral por el momento se siente aliviado). En esta serie todo es posible; recordemos la muerte de Gray en el arco de los Grandes Juegos Mágicos como caso más patente, aunque ha habido un par más de regresos por ahí.

Mashima rompiendo corazones desde hace años.
Eso si, Sieghart hay y habrá uno solo.

De todas formas nadie puede negar que lo de Sieg en la anterior obra de Mashima fue un tremendo golpe cargado de sentimientos, y por sobre todas las cosas era un personaje al cual la propia trama de la serie le tenía respeto, todo lo contrario a lo ocurrido con el ex-Phantom Lord.

¿Se acuerdan cuando era un tipo rudo?
Pocos se lo habrán imaginado lagrimeando.


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